Todos hemos estado en conciertos buenos, malos, aquellos en los que salimos extasiados. ¿Qué debemos hacer para preparar un concierto que no deje indiferente al público?

Uno de los principales aspectos a tener en cuenta es el set list, que temas interpretaremos y su orden. El orden es un aspecto importantísimo que puede suponer la diferencia entre dejar indiferentes a nuestro público o crear un gran impacto positivo.

Lo idóneo es comentar por un tema introductorio, de bienvenida, de presentación de lo que la gente va a poder ver, escuchar, vivir y sentir; y si es breve mejor, para que deje al público preparado y expectante en espera del segundo tema. El segundo tema ha de ser mas largo y serio musicalmente hablando, el público está fresco, receptivo. En los sucesivos temas hay diversidad de opiniones y opciones, se puede ir del más antiguo al más nuevo o viceversa, ir alternando un tema nuevo o uno antiguo. En definitiva hay que mantener la expectación, la excitación, mantener vivo el interés del público. Nos acercamos a las pieza final ha de ser una canción conocida que deje a la gente en un nivel de excitación tal, que le haga sentir que este concierto no debería de terminar nunca. Para pasar después a los bises con los grandes hits que dejen ese buen sabor de boca con el que sale uno después de un buen concierto.

Un buen concierto debe de ser puntual, aunque esto es algo, que en la práctica (por desgracia) no suele ser habitual, dejando una sensación de falta de organización e ineficacia que empaña el concierto. Eso sin tener en cuenta que es una costumbre artísticamente arrogante.

Tenemos que tener también muy en cuenta la duración cuando ello dependa de nosotros. En este sentido decir a veces lo breve es dos veces bueno, por lo que aunque tengamos todo el tiempo del mundo no es necesario utilizar todo para tocar todo nuestro repertorio musical.

Otro aspecto muy importante es que hacer en cuanto a las presentaciones de las canciones y a hablar o no. Es bueno presentarnos, presentar cada tema y a nuestros músicos (el no hacerlo es negativo) ello genera un feedback entre interpretes y publico que es vital. Pero por otro lado es importante no tener en cuenta esa costumbre tan americana de realizar discursos y solos, solos y discursos interminables que aburren a las ratas y hace que estemos mas tiempo hablando con nuestro compañero de al lado que pendientes del concierto.

Y para finalizar puntualizaremos un aspecto muy importante: la presencia en el escenario, el saber estar, el moverse, transmitir seguridad, transmitir no solo con la música sino con los movimientos, con los gestos. Y como no, nuestra presencia y aspecto físico, nuestras vestimentas acorde con lo que estamos viendo, lo que queremos transmitir, nuestra música.

¿Listo ya para dar tu concierto?